martes, 13 de mayo de 2014

Legalización de las drogas o el sueño de acabar con las mafias



Hace pocos días se celebró la marcha por la legalización de la marihuana, por motivos varios ha sido un evento al que no le he seguido la pista, así que ignoro si se trato de concentraciones a nivel mundial, algo aislado o con replicas en tan solo unos cuantos países. Sin embargo, con el peligro de ser tomada como una extremista, me animo a dejar sobre esta página unas cuantas ideas mal desarrolladas que tengo acerca del consumo de drogas en general. Advierto desde el inicio que no he expuesto a mis ideas hasta las últimas consecuencias, de alguna manera escribir resulta una manera de pensar en detalles ignorados y puede que mientras hago este ejercicio me olvide de muchos otros y los deje sin explorar.

¿Qué pasa con las drogas? ¿y sin un día nos dejamos de tonterías y las legalizamos todas? Así, como por joder… joder a la gran mafia que se enriquece en el callejón oscuro sin legislar por supuesto. Algunos ya han debido caerse de la silla y otros han hecho un click rápido y certero para salir de esta página que no sabe lo que escribe… y es cierto, no sé lo que escribo porque me da un poquito de flojera investigarlo, pero supongo que los datos están ahí… la comparación numérica de muertos antes y después de la ley seca en EEUU. Que yo sepa en EEUU a día de hoy el alcohol no se regala en las escuelas, no se fomenta a los teenagers a consumirlo, pero esta legislado y si un adulto con toda la libertad que posee decide morir bebiendo whisky añejo 40 años, hay una ley que lo protege y no permite que un día en la tienda le den una botella de alcohol para quemar (cosa que pasa todos los días con las drogas).

Porque seamos claros, legalizar las drogas no quiere decir que a partir de hoy las entreguemos en la escuela como parte del desayuno escolar, no seamos ingenuos. Legislarlas tampoco quiere decir que mágicamente serán buenas para nuestra salud. 

Quien decide tomar drogas corre doble riesgo, el de las drogas en sí y el de consumir un producto en mal estado, adulterado y como no existe una OCU a quien recurrir en estos casos, mucha gente sin escrúpulos puede, básicamente vende, productos adulterados, no testados, tóxicos, etc. Imagínense cómo era en los años 20 morir por una copa de whisky en malas condiciones… pues lo mismo.

Quien consume drogas en el silencioso escondite de lo ilegal, no debe pensar en las consecuencias si no, hasta que es demasiado tarde y le importa todo tan poco que está dispuesto a vender su cuerpo por una raya más… si las drogas se vendieran bajo una especie de prescripción o una libreta electrónica que lleve el registro de los consumidores, aquellos ocasionales tendrían que sopesar las consecuencias de un acto repudiado y publico.

Por último, todos aquellos países que en este momento son productores, que talan bosques contaminan ríos, esclavizan gente (el sistema esclavista moderno es todavía más efectivo) y que juegan a la ruleta rusa con la gente que gira la rueda y se juega la vida trabajando de mulas… todo eso, se acabaría, porque tal como con cualquier otro producto, al llegar las regularizaciones y entrar en el mercado de competencia (aunque se trate de una nada perfecta) al no poder cobrar precios exorbitantes por cada gramo producido, se quitaría la posibilidad de manejar fortunas al mínimo esfuerzo, y los bosques regresarían a la protección de valer más como bosque que como una fábrica de mierda (nunca mejor dicho) en el medio de la nada.

El gran temor por supuesto es que aumentaría el consumo… puedo conectar con el miedo que causa lo desconocido y nuevo, pero no entiendo muy bien este argumento, como decía al principio legalizar no quiere decir fomentar, estamos hablando ahora de regular. Las campañas antidrogas serian las mismas que existen a día de hoy, es más, con los nuevos ingresos en concepto de impuestos se podría destinar más fondos a la prevención. Como dice el refrán “muerto el perro se acabo la rabia” y sin el mercado negro, las drogas en todo su proceso (producción, comercialización, consumo etc) cobrarían menos vidas de que actualmente se cobra.