sábado, 20 de diciembre de 2008

Pequeño ensayo sobre el amor de patria

Que difícil resulta amar a la patria, ese pedazo de tierra que nos llama entre susurros los días de lluvia, surge la pregunta tal como dice un verso popular “¿Con qué hierbas me cautivas, dulce tierra boliviana?"... y dan ganas de gritar, de preguntar quien tenía derecho a inculcarnos el amor a una tierra tan engañosa, tan llena de contradicciones, tan inverosímil.

Por que hay días en los que uno se cansa de tanto amor no correspondido y tiene ganas de olvidarlo todo, las clases de historia, la gente del lugar, las vivencias… todo, para poder empezar desde cero una nueva vida, una menos ingrata. Dan ganas de nacer otra vez y elegir una tierra más amable. Pero nada, no hay manera, de todos modos cuando pasa algo que nos incita al odio terminamos endulzando los ojos y recordando las cosas buenas, la eterna sensación de ser una prueba viviente del realismo mágico.

Y aunque estamos conscientes de que no existen motivos claros por los cuales seguir amándola, nos invade tal vez la resignación de pensar que es la única madre patria que tenemos. Resignación… sentimiento cada vez mas fuerte, resignación de repetir una y otra vez “Solo ocurre en Bolivia” porque se acaban las palabras, los gestos de admiración, solo en Bolivia las masas colgaron a presidente indigenista, solo en Bolivia se eligió democráticamente a un ex dictador con juicios de genocidio pendientes… solo en Bolivia una lista larga.

Se pasa con facilidad del “te quiero país de barro” al te odio país de mierda, sintiendo en pleno centro del odio la culpa de quien rechaza sus raíces, porque se puede cambiar de vida, reestructurar el futuro, cambiar los horizontes, pero no se puede olvidar las raíces, el orgullo de pertenecer a una cultura tan rica y fuerte como la que vive entre cordilleras y amazonia.

De cierta manera se entiende tanto resentimiento, como le ocurre a los seres violados que uno sabe que tienen razón pero de todos modos quiere que cambien, que avancen, que dejen atrás el pasado y miren el futuro, y nada, todo estancado y al mismo tiempo en un movimiento inestable de uranio, de metal vivo que marco la historia.

Mujer tres veces maldita con malos amantes en cada esquina, mujer condenada al olvido a la desaparición… nosotros sus hijos sentimos rabia e impotencia, ganas de levantarle la mano y al mismo tiempo defenderla….

País en constante ebullición, la olla del diablo la llamaría yo, una olla que a pesar del dolor que me causa… amo.

14 Invisibles:

RAMPY dijo...

Ese mismo sentimiento tengo yo con respecto a mi país, España. Ciertamente es una gran contradicción.
Pero en fin, supongo es porque los seres humanos somos así de contradictorios.
Un beso enorme y felices fiestas

Cecy dijo...

Me es tan hermano ese sentimiento querida Lilyth, que me desgarra saber que somos hijos de tierras maltratadas, violentadas, por miseros demonios.

Te abrazo querida.

Marysol Salval dijo...

Ay Lilyth, me identifico mucho con tus sentimientos. Pero a la Patria no se le ama por sus gobernantes, Se le ama porque formamos parte de ella, de su gente, de sus cotumbres, de sus paisajes.
Estimada amiga,con poco tiempo para conectarme en estas fechas, vine a dejarte mi abrazo y mis mejores deseos para tí en estas Fiestas. Mil bendiciones para tí. Gracias por tu cálida compañía.

Anca Balaj dijo...

Hermoso y desgarrador al mismo tiempo, no sé si te envidio (por esa pasión) o si te compadezco por el amor no correspondido. Me encantan estos textos tan sinceros, Lilyth

Un beso

cristal00k dijo...

La tierra forma parte de nuestro patrimonio emocional, por eso crea en nosotros, sentimientos tan encontrados. Lúcido y entrañable post Lilyth.
Besos y felices días.

Duncan de Gross dijo...

Uff, yo me uno a Rampi, lo mismo pasa aqui en Aspanya, donde tenemos que yo sepa, tres o cuatro comunidades que se quieren independizar, un grupo terrorista desde hace 40 años, dos ciudades que quiere Marruecos, y una bandera que levanta ampollas aún...Así que, en todos sitios cuecen habas...

Vania B. dijo...

La Patria es como la madre de uno, por más que sea una madre descuidada de sus hijos, una mujer maltratada por varios demonios, la mujer más inverosimil de la tierra, es nuestra madre y nosotros hemos nacido de ella, así que difícil olvidarla y pretender haber sido paridos por la nada.

Un abrazote, como siempre.

payorivero dijo...

El comienzo me asustó un poco. Esta mi traicionera cabeza politóloga recordó inmediatamente las palabras de Jaime Paz cuando en Junio de 2002 dijo: "Que difícil es amar a Bolivia" y le dió el 'apoyo' político a Goni.
Yo siento que la 'patria' es una construcción histórica, un imaginario colectivo que nos permite reconocernos y compararnos, ese búsqueda social por hallar pertenencia que se enlaza con nuestras vivencias, experiencias, acumulaciones, frustraciones y aspiraciones. Es una suerte de traición subjetiva y necesidad de identificarse.
Injuzgable.
Muchas gracias por el comentario pero sobre todo por los deseos.
Que las fiestas te traigan paz y aire renovador.

Maria Coca dijo...

El país de cada uno siempre pienso que levanta sentimientos contrarios, como bien describes.

Besoss

frivertt dijo...

Pues dicen que AMAR duele, apesar de ello seguimos amando, también dicen "no hay más generosa que tu tierra" por eso amamos a los nuestros y nuestra tierra apesar de todo, todos tenemos errores que cometimos alguna vez, ¿el Amar es también un ERROR? si es así, cometi muchos...y con mi Patria también.
Cuidate mucho, que tengas felices fiestas y que el 2009 se lo mejor para ti en todo sentido.
Besos y abrazos.

José Manuel dijo...

ahhh!, que triste me ponen éstas cosas...
bueno, yo venía a dejarte mis mejores deseos, y un fuerte abrazo.
Besos y Felices Fiestas...

Mónica dijo...

Lilyth, quería desearte una muy feliz navidad, junto a tu familia y a migos.

Bsss. Y por que continuemos la amistad en el 2009!!!


Bsss.

Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Anónimo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.